Por Coordinadores Red Kolumbien
El distanciamiento social obligatorio decretado a nivel nacional por cuenta del COVID-19, pandemia que atraviesa al mundo entero, nos ha llevado a adoptar en poco tiempo y de forma rápida cambios en nuestros comportamientos. Esta sacudida ha estado cargada de retos técnicos y adaptativos para todos nosotros, pero también ha sido un tiempo para aprender.
Hoy tenemos la firme convicción de que no podemos salir de esto solos ni solas y hemos presenciado como cada día se ha vuelto una oportunidad para elevar la cooperación entre la humanidad y hacer que nuestras vidas tengan un antes y un después. Somos testigos de un auge en la solidaridad, en lo colectivo, en pensar en el “otro”, en hacer que los cambios positivos sean sostenibles en el tiempo.
Por esto, desde la Red Kolumbien continuamos trabajando desde casa, escritorios, despachos y en el terreno creyendo que todos y todas podemos aportar para construir una mejor sociedad. Con esta entrada, los coordinadores de esta tejida Red nos preguntamos ¿en tiempos de cuarentena, dónde queda el liderazgo?, intentando plasmar una reflexión desde el encierro de los cuerpos, pero no de nuestro compromiso con la transformación.
Jhon Steven Contreras y Danna Rodriguez.
Coordinadores Generales
Me encontraba sentado en la silla que da al escritorio donde ahora trabajo, estudio, almuerzo y medito. Entre la ansiedad que me produce la exigente optimización del tiempo y, el aislamiento, desbaraté un esfero (bolígrafo) dejando caer sus piezas en desorden. Tomando una de ellas, en una de esas reflexiones relámpago que disfrutamos, se me ocurre imaginar que el liderazgo es un resorte: tiene un objetivo, es importante aún sin ser imprescindible, es útil, pero sobretodo es dinámico, versátil.
Por estos días, el liderazgo, cuál resorte, sólo podrá dar un gran salto luego de ser comprimido, y si algo nos ha enseñado esta cuarentena es a estarlo. El liderazgo no se queda en ninguna parte, si no que va, por ahora y desde casa, probando sus niveles de adaptación y proyectando el lugar donde desea estar mañana mientras todo vuelve a ser normal, si es que en algún momento lo fue.
Sebastián A. Rey Diaz.
Coordinador nodo Acción Política y Liderazgo
En esta pausa inesperada y en medio del confinamiento, hemos dedicado junto a mi entorno el tiempo a la reflexión.
Hábito en la localidad más grande de Bogotá, la más poblada, la más desigual, eso hace que me enfrente al gran reto de ser líder e instar a mi comunidad a ser positivos y responsables, frente a la pandemia. Todo ese liderazgo y capacidad de escucha, que he cultivado con la Fundación Domopaz y Hanns Seidel, a lo largo de 6 años, hoy se pone prueba, como «arma» para servir en esta difícil coyuntura.
Es el poder de la palabra y la paciencia como virtud, lo que un líder necesita en este crucial momento.
Liz Rozo Silva.
Coordinadora nodo de Paz y DD.HH
Los líderes tienen la capacidad y el discernimiento para actuar con determinación y ayudar a las personas que necesitan de una mano amiga. En los tiempos de crisis; políticas, económicas o sanitarias, las sociedades han sido resilientes para superar sus dificultades, con trabajo en equipo y carácter, sin ignorar el depredador instinto competitivo y consumista que caracteriza nuestro modelo económico.
Los ecosistemas tienen una tendencia natural de autorregularse y estabilizar sus hábitats, este principio se hace visible cuando nuestra especie debe resguardarse en casa para evitar el contagio de COVID-19, y la naturaleza está retornando lentamente a su cauce. Pero debemos entender que las cosas no volverán a ser iguales y muchas personas van a soportar dificultades, el liderazgo en medio de esta cuarentena debe destacarse por ayudar aquellos que lo necesitan y velar por el cuidado del mayor sustento para la humanidad que es nuestro planeta.
Samuel D. Quiceno P.
Coordinador nodo Ambiental
En medio de la crisis que vivimos llegó el momento de hacer un alto obligatorio y reflexionar, ¿cómo estamos viviendo? ¿Cuál legado queremos dejar? y ¿de qué manera impactaremos a la sociedad desde un computador o el Smartphone en mi casa?
En medio de un mar de preguntas que inundan nuestra mente y de tanto “tiempo libre”, es momento de dejar nuestras diferencias ideológicas a un lado, quitar nuestras etiquetas y poner por encima nuestro planeta, nuestra nación, nuestra ciudad, nuestra familia y nuestra vida. Menos crítica y más acción, menos protesta y más propuesta, más proyectos, más soluciones. Que la solidaridad, la fe y la esperanza sean los motores que nos muevan día a día, solos no podemos hacer nada pero estando unidos así no estemos juntos nos permitirá liderar los grandes cambios estructurales que demanda nuestra generación.
Tania López Lizca.
Coordinadora nodo Comunicaciones